En el número de enero (409), la revista mexicana Nexos publica un ensayo mío, “La osadía del disfraz”, cuya primera versión fue dada a conocer en el Miretario hace ya un año. He aquí el link para su consulta,
La “Obertura” plantea: “La migración mexicana a Estados Unidos dio forma a una práctica cultural añejada en la literatura, el cine y las artes secuenciales. Tan añeja en el reino literario que se remonta al siglo XIX con el registro testimonial, la crónica realista y la ficción literaria; conforma una luenga tradición en el cine nacional arraigada desde la primera década del siglo XX; encuentra su epicentro en las artes plásticas cuando se apagan las llamas de la Revolución mexicana. Esta práctica consiste en el retrato de los emigrantes tanto en su tránsito como en las cuitas del retorno, los motivos del éxodo y la nostalgia de la suave patria. Tales migrantes son percibidos, a veces confusamente, como indocumentados, pachucos, mojados, ilegales, chicanos, pochos o espaldas mojadas en el cine o la literatura de las dos naciones vecinas.”
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